Principio de dolores
Mateo 24:8 “Y todo esto será principio de dolores”.
La situación actual del mundo.
Guerras y rumores de guerras.
En estas profecías que Jesús habló, nos hace ver claramente que en los tiempos que precederían a su segunda venida, habría guerras. Nos dice en Mateo 24:6-7. “Y oiréis de guerras y rumores de guerras; mirad que no os turbéis, porque es necesario que todo esto acontezca; pero aún no es el fin. Porque se levantará nación contra nación (...)”.
Pestes, hambres, terremotos.
nEn Mateo 24:7, nos dice Jesús “(...) y habrá pestes, y hambres, y terremotos en diferentes lugares”. En este país, hay hambre, enfermedades de todo tipo como el SIDA, hay terremotos constantemente y en diferentes partes del mundo. Hay un sinfín de situaciones que nos muestran que la venida de Cristo Jesús está muy cercana.
Principio de dolores.
nJesús advierte en Mateo 24:8 “Y todo esto será principio de dolores”. El panorama mundial está preparándose. Se están dando situaciones que hace cuarenta o cincuenta años no se pensaban. Las profecías se cumplen. ¿Cuál debe ser nuestra actitud ante todo esto?
Que dice la palabra de Dios ante estas situaciones.
No debemos ser engañados.
nNo dejemos que nos sorprendan. En Mateo 24:4, encontramos: “Respondiendo Jesús, les dijo: Mirad que nadie os engañe.” Los acontecimientos mundiales actuales no son para espantarnos, ni para que nos engañen, ni para que nos sobresaltemos. En estos tiempos hay engaños de tipo religioso (se levantan líderes religiosos falsos que se aprovechan de la gente y les engañan), hay levantamientos sociales y políticos, hay deslealtad y persecución en algunos casos, pero esto está anunciado por Jesús. No dejemos que alguien nos sorprenda. Diciendo que es un Mesías o aún que es Cristo. Jesucristo viene pronto y la palabra nos indica como vendrá.
Es necesario que estas cosas acontezcan.
nA veces nos ponemos a pensar por qué hay hambres, dolor, muerte, desastres, tragedias. Al pensar en eso nos afligimos, nos turbamos, pero la palabra dice en Mateo 24:6 “Y oiréis de guerras y rumores de guerras; mirad que no os turbéis, porque es necesario que todo esto acontezca; pero aún no es el fin”. Dios sabe por qué permite todo esto y no debemos cuestionarlo. Él es soberano, Él tiene toda autoridad.
Esto es principio de dolores.
nEstos dolores se semejan a los dolores de parto. Son dolores que anuncian el fin de esta era, pero que anuncian el nacimiento de un nuevo ciclo de vida eterna para los hijos de Dios. Cuando un niño nace hay dolor en la madre, pero ella está pensando en los dolores sino en la bendición que viene a su vida. Así debemos ser nosotros los cristianos, debemos ver las bendiciones que vienen.
La iglesia actual y su función ministradora.
La iglesia porque tiene a Cristo es solución y no parte del problema.
nLa iglesia debe proclamar que en Cristo Jesús hay solución a los problemas actuales. La palabra de Dios dice en Juan 14:6 “Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí”. Jesús ofrece solución porque Él es le único camino, es la única verdad, y es el único que da vida. Jesús es solución a toda situación en esta vida. Especialmente en estos tiempos finales donde hay angustia y dolores.
La iglesia debe conducir al pecador a los pies de Cristo.
nLa palabra de dice en 2 Pedro 3:9, “El Señor no retarda su promesa, según algunos la tiene por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento”. La función de la iglesia es conducir al pecador a los pies de Cristo y hacerlos discípulos que a su vez conduzcan a otros al Señor. Si no lo estamos haciendo o lo estamos haciendo mal, la situación actual debe hacer reflexionar la iglesia (y la iglesia es usted y yo). Dios ha tenido paciencia a la iglesia. Su misericordia está sobre el pecador, pero su iglesia no debe esquivar su responsabilidad.
La iglesia tiene un futuro glorioso.
n¿a dónde irán mis parientes? ¿a dónde irán mis mejores amigos que no conocen a Cristo? ¿a dónde voy yo? Yo como hijo de Dios voy al cielo, porque Hechos 15:11 dice: “Antes creemos que por la gracia del Señor Jesús seremos salvos, de igual modo que ellos”. Y Efesios 2:8 dice: “Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios”. Yo por la gracia infinita de Dios voy al cielo, a la presencia del Padre, pero debe actuar. Lo que voy a gozar, que lo gocen también aquellos que están sufriendo y están angustiados, y no tienen esperanza.
Conclusión: Amigo que escucha este mensaje no viva con aflicciones, viva con Cristo en su corazón. Hermano en estos tiempos de sufrimiento para mucha gente sin Cristo, debe compartir que Él es la solución para este mundo en crisis y en dolor
La situación actual del mundo.
Guerras y rumores de guerras.
En estas profecías que Jesús habló, nos hace ver claramente que en los tiempos que precederían a su segunda venida, habría guerras. Nos dice en Mateo 24:6-7. “Y oiréis de guerras y rumores de guerras; mirad que no os turbéis, porque es necesario que todo esto acontezca; pero aún no es el fin. Porque se levantará nación contra nación (...)”.
Pestes, hambres, terremotos.
nEn Mateo 24:7, nos dice Jesús “(...) y habrá pestes, y hambres, y terremotos en diferentes lugares”. En este país, hay hambre, enfermedades de todo tipo como el SIDA, hay terremotos constantemente y en diferentes partes del mundo. Hay un sinfín de situaciones que nos muestran que la venida de Cristo Jesús está muy cercana.
Principio de dolores.
nJesús advierte en Mateo 24:8 “Y todo esto será principio de dolores”. El panorama mundial está preparándose. Se están dando situaciones que hace cuarenta o cincuenta años no se pensaban. Las profecías se cumplen. ¿Cuál debe ser nuestra actitud ante todo esto?
Que dice la palabra de Dios ante estas situaciones.
No debemos ser engañados.
nNo dejemos que nos sorprendan. En Mateo 24:4, encontramos: “Respondiendo Jesús, les dijo: Mirad que nadie os engañe.” Los acontecimientos mundiales actuales no son para espantarnos, ni para que nos engañen, ni para que nos sobresaltemos. En estos tiempos hay engaños de tipo religioso (se levantan líderes religiosos falsos que se aprovechan de la gente y les engañan), hay levantamientos sociales y políticos, hay deslealtad y persecución en algunos casos, pero esto está anunciado por Jesús. No dejemos que alguien nos sorprenda. Diciendo que es un Mesías o aún que es Cristo. Jesucristo viene pronto y la palabra nos indica como vendrá.
Es necesario que estas cosas acontezcan.
nA veces nos ponemos a pensar por qué hay hambres, dolor, muerte, desastres, tragedias. Al pensar en eso nos afligimos, nos turbamos, pero la palabra dice en Mateo 24:6 “Y oiréis de guerras y rumores de guerras; mirad que no os turbéis, porque es necesario que todo esto acontezca; pero aún no es el fin”. Dios sabe por qué permite todo esto y no debemos cuestionarlo. Él es soberano, Él tiene toda autoridad.
Esto es principio de dolores.
nEstos dolores se semejan a los dolores de parto. Son dolores que anuncian el fin de esta era, pero que anuncian el nacimiento de un nuevo ciclo de vida eterna para los hijos de Dios. Cuando un niño nace hay dolor en la madre, pero ella está pensando en los dolores sino en la bendición que viene a su vida. Así debemos ser nosotros los cristianos, debemos ver las bendiciones que vienen.
La iglesia actual y su función ministradora.
La iglesia porque tiene a Cristo es solución y no parte del problema.
nLa iglesia debe proclamar que en Cristo Jesús hay solución a los problemas actuales. La palabra de Dios dice en Juan 14:6 “Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí”. Jesús ofrece solución porque Él es le único camino, es la única verdad, y es el único que da vida. Jesús es solución a toda situación en esta vida. Especialmente en estos tiempos finales donde hay angustia y dolores.
La iglesia debe conducir al pecador a los pies de Cristo.
nLa palabra de dice en 2 Pedro 3:9, “El Señor no retarda su promesa, según algunos la tiene por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento”. La función de la iglesia es conducir al pecador a los pies de Cristo y hacerlos discípulos que a su vez conduzcan a otros al Señor. Si no lo estamos haciendo o lo estamos haciendo mal, la situación actual debe hacer reflexionar la iglesia (y la iglesia es usted y yo). Dios ha tenido paciencia a la iglesia. Su misericordia está sobre el pecador, pero su iglesia no debe esquivar su responsabilidad.
La iglesia tiene un futuro glorioso.
n¿a dónde irán mis parientes? ¿a dónde irán mis mejores amigos que no conocen a Cristo? ¿a dónde voy yo? Yo como hijo de Dios voy al cielo, porque Hechos 15:11 dice: “Antes creemos que por la gracia del Señor Jesús seremos salvos, de igual modo que ellos”. Y Efesios 2:8 dice: “Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios”. Yo por la gracia infinita de Dios voy al cielo, a la presencia del Padre, pero debe actuar. Lo que voy a gozar, que lo gocen también aquellos que están sufriendo y están angustiados, y no tienen esperanza.
Conclusión: Amigo que escucha este mensaje no viva con aflicciones, viva con Cristo en su corazón. Hermano en estos tiempos de sufrimiento para mucha gente sin Cristo, debe compartir que Él es la solución para este mundo en crisis y en dolor
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